La gelatina comestible está disponible en dos formas: láminas y polvo soluble. El polvo se usa ampliamente en aplicaciones industriales, mientras que las láminas de gelatina son la elección más habitual para consumidores finales. Las dos son solubles en agua caliente y gelifican al enfriarse.

Algunos polvos de gelatina son solubles en frío, tales como gelatina hidrolizada o gelatina soluble (instantáneamente).